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Proyecto Expresarte: la arteterapia al servicio de la Rehabilitación Psicosocial

El Centro de Día Carabanchel, gestionado por la Fundación El Buen Samaritano, desarrolla desde el pasado mes de octubre el Proyecto EXPRESARTE. Un proyecto que persigue como objetivo principal,

arte2“Fomentar el bienestar biopsicosocial y promover una buena gestión emocional a partir de la exploración de los procesos creativos, facilitándose de este modo el desarrollo y la consolidación de nuevas herramientas de expresión y comunicación”.

Es pertinente destacar que para poder realizar el presente proyecto es indispensable considerar los aportes que la arteterapia proporciona en el ámbito de Salud Mental. Entre otros, a saber:

 

LA ARTETERAPIA es ante todo una técnica que posibilita comunicarse con y a través de materiales artísticos y, a partir de aquello creado en un entorno seguro, facilitar la exploración, la expresión y en muchas ocasiones, la resolución de conflictos emocionales.

Desde un lugar profesional tenemos que tener claro nuestro rol: ayudar a abrir el proceso creativo de la persona, acompañarla en su creación, acoger la producción sin juzgarla, ofrecer un marco confortable y seguro y propiciar una relación empática triangular -participante-obra-terapeuta-. Sin olvidar: siempre interesará más el proceso que el resultado final.

Es una técnica aplicable a personas de todas las edades y diversos contextos, entre los cuales, los Centros de Rehabilitación Psicosocial ocupan un lugar de privilegio. ¿Y esto por qué?

  • Porque su aplicación está especialmente indicada en personas que -como consecuencia de su padecimiento psíquico, biológico o social- tienen dificultades para articular sus conflictos verbalmente; con la maravillosa constatación de que gracias al proceso creativo, muy a menudo la palabra logra vehiculizarse.
  • En línea con lo anterior, porque es un ámbito donde es posible “hablar” del conflicto sin necesidad de hacerlo de un modo directo y, ante todo, pudiendo ser respetuosos del mecanismo defensivo de los participantes.
  • Porque mediante la producción de imágenes y objetos artísticos es posible restablecer la capacidad natural del individuo para relacionarse consigo mismo y con el mundo que le rodea de forma satisfactoria.
  • Y en especial, porque progresivamente se facilita la desidentificación de un exclusivo rol de enfermo.

En síntesis:

Desde la arteterapia, EL TRABAJO CREATIVO CONECTA CON LA PROPIA FUERZA VITAL y quien está participando, al verse requerido a asumir UN NUEVO ROL -EL DE CREADOR-, desarrolla un sentido de EMPODERAMIENTO y consolida un ENRIQUECIMIENTO DE LA PROPIA IDENTIDAD.