Desde el CRL Villaverde seguimos adaptando nuestras actividades a la situación sociosanitaria en la que vivimos.
El Club Deportivo de nuestro CRL nació hace 5 años con el objetivo general de crear hábitos de vida saludables que repercutan en la salud, bienestar y autoestima; así como aumentar la conciencia sobre la importancia del cuidado personal como otra herramienta más que favorece oportunidades de acceso al mercado laboral.
Hasta la llegada de la pandemia esta actividad se realizaba semanalmente al aire libre o en el centro. Realizábamos en grupo actividades físicas aeróbicas como marcha, escaleras, trotes, o actividades de resistencia.
La nueva situación sanitaria nos ha forzado a buscar nuevas fórmulas para seguir trabajando algo tan importante para la salud mental como es la condición física. Ya en el confinamiento se puso en marcha un nuevo formato online para realizar ejercicio físico que se mantiene hasta hoy.
De lunes a viernes a partir de las 9:15 nuestra Terapeuta Ocupacional lleva a cabo a través de plataforma zoom un entrenamiento de resistencia, flexibilidad y estiramientos para todas las personas que están interesadas en mejorar su actividad física.
Insistimos en mantener esta actividad a pesar del hándicap de realizarlo online y de forma individual, ya que existe cada vez mayores evidencias de las relaciones entre actividad física y la salud. En general, la actividad física y el deporte, no sólo producen una mejora del estado físico de la persona, sino también puede generar efectos positivos en diversas esferas, como son el fortalecimiento de la autoestima, el aumento de la sensación de control, el incremento de la autoconfianza, la mejora global de la calidad de vida y la posibilidad de afianzar lazos y redes sociales.
Las actividades deportivas fomentan también el espíritu de equipo, la conciencia de una meta común y el aprendizaje de la necesidad de esforzarse para conseguir objetivos a medio y a largo plazo, aspectos de suma importancia también en contextos laborales.
En resumen, la actividad físico-deportiva constituye una importante herramienta terapéutica en el proceso de rehabilitación, habiendo demostrado su eficacia para mejorar el estado físico, el equilibrio personal, la organización del tiempo libre, la socialización y la motivación para el cambio positivo.
Al finalizar la actividad se aprovecha para tratar otros aspectos fundamentales para alcanzar unos hábitos saludables: alimentación equilibrada, el uso de calzado y ropa acorde con la actividad que realizamos, la importancia del descanso o de dejar de fumar.